Pobre Gwyneth
Cuentan últimamente los medios de comunicación que a la actiz Gwyneth Paltrow le han regalado una finca en tierras manchegas y que esa finca está cerca de una granja de cerdos. Y entonces una se da cuenta, eso no es un regalo, es una putada, así, con todas sus letras. ¿Qué por qué? Los que os preguntaís eso se nota que no conoceís el olor que desprende una de esas granjas. De todos los olores asquerosos que hay en el mundo, éste los supera a todos. Y lo digo por experiencia. Acabo de venir de mi recuperado paseo diario por los alrededores de mi casa. La caminata transcurre por una serie de caminos rurales, uno de los cuales pasa a unos quinientos metro de una granja porcina. Y el olor es apestoso. Claro, que será peor cuando los agricultores empiecen a abonar sus fincas con los purines (los excrementos de los cerdos), entonces será mejor irse a vivir a otro sitio. Los que piensan que el campo es un lugar sano en el que se respira aire puro están muy equivocados. Al menos si cerca se tiene una granja de cerdos. Supongo que es el precio que hay que pagar por comer delicias como el jamón y el chorizo.
4 comentarios
Anónimo -
ildara -
Recuerdo una vez cerca de segovia que abrí la ventanilla del coche, que horror, que peste, y yo soy un ratón de campo, pero aquel olor era asqueroso, penetrante... agggg.
Jorge -
la niña de la capucha -