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El Caldero de la Bruja

PAJAS Y VIGAS

El nuevo Gobierno ya ha cumplido una de sus promesas electorales, quizá una de las más esperadas: ordenar el regreso de las tropas de Irak. Hay quien opina que esta promesa fue una de las causas de la victoria de Zapatero en las últimas elecciones. Por ello sorprende la reacción del PP (o quizá no). Que no estaban de acuerdo con la medida era conocido por todos. Pero los comentarios de los líderes populares no dejan de sorprender.
Acusan a Zapatero de haber tomado la decisión sin consultar y sin un debate previo. Vamos, que sólo les ha faltado decir que se ha comportado como ellos. Sin embargo, hay una diferencia fundamental: en esta ocasión se trata de traer a los soldados españoles desde un país en guerra, no de meterles en una. Partiendo de la base de que el noventa por ciento de la ciudadanía española estaba en contra de la invasión de Irak, parece acertado pensar que esa mayoría estará también a favor de que los militares españoles vengan cuanto antes. Especialmente tal y como se han puesto las cosas en la zona.
Pero bueno, el PP es el PP y todos nos esperábamos una reacción semejante. Al fin y al cabo puede poner en peligro la “sólida alianza con Estados Unidos”. Como si pudiera existir algo semejante. Lo que de verdad me ha sentado fatal ha sido el articulito que ha publicado el “The Wall Street Journal” diciendo que Zapatero está aislando España igual que lo hizo Franco en sus tiempos. Es curioso, pero hasta donde yo sé, son muchos los países del mundo que no sólo no han enviado tropas a Irak, sino que están en completo desacuerdo con la invasión de dicho país. Y entre esos países están Francia y Alemania que, como todo el mundo sabe, son países sin apenas importancia en el ámbito internacional, y especialmente en el europeo.
Lo que tenían que hacer lo mismo los del PP que los del “The Wall Street Journal” es dejar de criticar tanto a los demás y arreglar sus pequeños defectillos, por ejemplo, permitir que la sociedad norteamericana vea los féretros de sus soldados como los vemos los demás y conozca un poquito más la realidad de lo que está pasando en Irak, en lugar de practicar tan alegremente la censura.
Y dejarse de invadir países y de comportarse como si George Bush fuera Vito Corleone, no vaya a ser que le día menos pensado el juez Garzón se encuentre un poco aburrido y le dé por intentar procesarle. Seguro que motivos para ello no le faltan. Y tarde o temprano hasta los imperios más fuertes caen. Y si no que se lo digan a Aznar, que de mayoría absoluta ha pasado a la oposición.
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